Cierto día, alguien que observaba al grupo, le llama aparte y le pregunta si todavía no había percibido que la moneda mayor vale menos.
- "Lo se respondió no soy tan bobo... esta vale cinco veces menos, pero el día que escoja la otra, el juego se acaba y ya no voy a ganar mas Monedas...
- La primera: Quien parece idiota, no siempre lo es.
- La segunda: ¿Quienes eran los verdaderos idiotas de la historia?
- La tercera: Una ambición desmedida puede acabar cortando “tu fuente de
Ingresos”.
Pero la conclusión más interesante es:
Podemos estar bien, aun cuando los otros no tengan una buena opinión sobre nosotros mismos. Por lo tanto, lo que importa no es lo que piensan de nosotros, pero sí, “lo que realmente somos”.
El mayor placer de un hombre inteligente es aparentar ser idiota delante de un idiota que aparenta ser inteligente. (Anonimo)